Para nuestro Dios, Nada es imposible.

Imagina que te dicen que tu hijo pequeño tiene cáncer. ¿Cómo reaccionarías como padre o madre? Esta fue la realidad de un niño llamado Job, de una de nuestras iglesias en Huancayo. En septiembre del año pasado, a Job le diagnosticaron cáncer después de que los médicos le descubrieran un tumor en una pierna. Desde ese momento, comenzó un largo proceso de quimioterapia que duró más de un año.

Pero por fe, mediante la oración y por el amor y la gracia de Dios, ¡Job ya no tiene cáncer! ¡Alabado sea el Señor! Aunque los médicos aún expresan preocupación por la posibilidad de que el cáncer regrese, sigamos orando por Job y su familia, para que se fortalezcan y se mantengan firmes en su confianza en el Señor Jesús. Él es nuestro Sanador, quien reina sobre toda enfermedad y ha vencido a la muerte.

Oremos también para que el testimonio de Job inspire y alcance a innumerables familias en todo Perú y Sudamérica, especialmente a aquellas que enfrentan batallas similares.